La flauta mágica es una ópera compleja, no sólo por las innumerables veces que ha sido llevada a la escena, sino también por su complejidad dramática en lo que se refiere al número de escenas y a las características de cada uno de los personajes. Este carácter complejo se exacerba todavía más si consideramos que, al margen de sus referencias populares, La flauta mágica surje de la imaginación, la fantasía y la locura de Wolfgang Amadeus Mozart, del subconsciente de un genio. Podemos, por tanto, relacionar esta obra con el mundo de lo onírico, y es en este ámbito del sueño donde se desarrolla la puesta en escena de La Fura dels Baus y Jaume Plensa, en un femtosegundo –«Un femtosegundo es a un segundo lo que un segundo es a treinta y dos millones de años» (Ahmed H. Zewail)– de sueño, algo menos que un parpadeo, algo menos que una chispa de inconsciencia.

El escenario deviene la mente o el palacio del conocimiento, un suelo luminoso puro sobre el que flotan los distintos elementos que componen la escena. El suelo se acota a partir de una docena de bloques hinchables, etéreos, capaces de simbolizar esas unidades de memoria que alberga nuestra mente. La puesta en escena refleja inevitablemente el carácter orgánico del cerebro, pero también transmite una de sus posibles simbologías, la de espacio transformable y en permanente fluctuación, en el que verdad y ficción se confunden y entremezclan. El escenario es, por tanto, un espacio de libertad, en lo que constituye una de las premisas básicas de La Fura dels Baus.

Existen muchas interpretaciones posibles para el ámbito de La flauta mágica: la proliferación de simbologías de origen múltiple e incierto, la inasibilidad espacio-temporal de los personajes, el elemento fantástico introducido en la acción, la indefinición moral de los principios que rigen la obra (ya que la pretendida difusión de ideas masónicas no alcanza para justificar ciertas actitudes de los personajes); todo ello contribuye a la ambigüedad de la atmósfera escénica.

Cabe destacar que, como ya había sucedido en anteriores trabajos operísticos del grupo, la puesta en escena dota a los personajes de toda una serie de códigos, en el vestuario o a partir de determinados colores, que permiten una nueva lectura del clásico.

Música
Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791).

Libreto
Emanuel Schikaneder

Versión escénica
La Fura dels Baus, Jaume Plensa.

Dirección escénica
Àlex Ollé, Carlos Padrissa (La Fura dels Baus).

Escenografía y vestuario
Jaume Plensa

Dirección musical
Marc Minkowski

Textos
Rafael Argullol

Creación y realización vídeo
Franc Aleu

Diseño de iluminación
Albert Faura

Ayudante de dirección
Valentina Carrasco

Asistente dramaturgia
Joachim Rathke

Dirección Coro
Walter Zeh

Reparto
Sarastro: Kwangchul Youn.
Tamino: Matthias Klink.
Orador: Olaf Bar.
Reina de la Noche: Erika Miklosa.
Pamina: Genia Kühmeier.
Primera dama: Dorothee Jansen.
Segunda dama: Marie-Belle Sandis.
Tercera dama: Marijana Mijanovic.
Papagena: Anne Cambier.
Papageno: Christian Gerhaher.
Monostatos: Burkhard Ulrich,
Markus Brutscher.
Tres niños: Sebastian Kausch, Raymond Leist, Paul Komusidi.
Hombre armado 1: Burkhard Fritz.
Hombre armado 2: Bernd Hofmann.
Sacerdote 1: Martin Busen.
Sacerdote 2: Thomas Ebenstein.
Voz en off: Dorte Lyssewski.
Vieja Papagena: Kazimiera Czakanski.

Les Musiciens du Louvre-Grenoble
Chor der Ruhrtriennale.

Bailarines
Lenka Bartunkova, Joris Camelin, Pavlina Cerna, Chihn-Lin Chan, Li-Li Chao, Andreas Ebbert-Scholl, Daniel Fetecva-Soto, Shirley Geacoman, Senem Gokce Gaeltekin, Alexeider Abad González, Manon Greiner, Giorgos Kamposoris, Chih-Ying Ku, Anja Kursawe, Sofian Labbani, Jorge Leandro, Carlos Martínez Paz, Carolina Varassi Pega, Kathryn Ressle, Mata Sakka, Edgar Sandovaz-Diaz, Jürgen Sieger, Simon Solberg, Lisa Stockinger, Simon Viersma, Jan Viethen, Roberto Zúñiga.

Asistente musical
Jérémie Rhorer, Mirella Giardelli.

Dirección técnica
Alberto Pastor

Realización escenográfica
Quim Guixá, Masters S.A, Scenotechnics.

Realización vestuario
Catou Verdier
Asistente vestuario
Tina Carstens

Regiduría
Angela Beuerle, Tine Buyse, Santiago Castillo, Isabel Franco, Carten Kirchmeier,
Katrin Reichardt.

Producción ejecutiva
Marta Pérez Porro

Estreno
7/9/03, en el Jahrunderthalle, Bochum.

Representaciones
10

Una coproducción de la Ruhrtriennale, bajo la dirección de Gerard Mortier; la Opéra National de París y el Teatro Real de Madrid.

Concebida y desarrollada entre La Fura dels Baus y Jaume Plensa, esta puesta en escena del clásico de Mozart –una de las óperas más conocidas del mundo– explora el espacio onírico de la obra desde la búsqueda del arte total.