La segunda aproximación de La Fura dels Baus a la ópera es la puesta en escena de El martirio de san Sebastián. Como ya sucediera con La Atlántida, El martirio de san Sebastián no es una ópera al uso, o al menos no es una ópera con un hilo argumental claro y perfectamente definido. Sobre la música de Claude Debussy, Gabrielle d’Annunzio construyó un drama simbolista alrededor del misterio medieval original y de la archiconocida imagen del santo asaeteado. En tanto que simbolista, el libreto de D’Annunzio ofrecía tantas lecturas como imágenes sugestivas, y esa riqueza se traducía a la postre en el primer problema que la puesta en escena debía superar. No existía una estructura arqumental sólida, tramada a partir de personajes sobre los que elaborar una propuesta escénica lo suficientemente articulada. Por tanto, la primera decisión que se tomó con respecto a El martirio de san Sebastián pasó por la creación de una dramaturgia paralela, capaz de soportar la lectura que la puesta en escena de La Fura dels Baus quería ofrecer.

Debussy y D’Annunzio dividieron su «misterio simbólico-musical» en cinco partes o estancias que temáticamente se refieren a la evolución de Sebastián. Son cinco partes sin nexos de unión, como escenas de un todo, que acaban perfilando el total del soldado que acaba siendo santo. En el montaje de La Fura se incorpora un nuevo personaje, el narrador, representado por un médico, que será el encargado de diseccionar, figurativa y metodológicamente, al hombre que es Sebastián para, desde la razón de la ciencia, discernir qué es lo que lo que lo hace tan especial, tan distinto y a la vez tan igual. Se mantienen la mayor parte de las «estancias», pero se establece una gran novedad: la última parte, la que se corresponde con la llegada de Sebastián al paraíso, pasa ahora a abrir la representación. Con este cambio sustancial se pretendía demorar sin solución el previsible final feliz, reforzando de ese modo la contradicción que alberga el santo, y ganar en simetría al asociar la muerte de Sebastián con la autopsia que abre el espectáculo, una especie de flashback espiritual.

Música
Claude Debussy (1862-1918).

Libreto
Gabrielle D’Annunzio (1863-1938).

Creación
Franc Aleu, Manuel Huerga, Àlex Ollé, Carlus Padrissa, Valentín Proczynski y Alfredo Taján; con la colaboración de Jaume Plensa.

Idea original
A.M.A. Le Tre Caravelle

Versión escénica
La Fura dels Baus

Dirección escénica y escenografía
Àlex Ollé, Carlos Padrissa.

Creación y realización vídeo
Franc Aleu, Manuel Huerga.

Dirección musical
Frederik Chaslin, Julian Kovatchev, Lorin Maazel, Georges Prêtre.

Vestuario y utillería
Jaume Plensa

Coreografía
Compañía Erre Que Erre

Adaptación y creación de textos
Guillem Martínez

Diseño de iluminación
Ramón Rey, Germinal Ruiz.

Diseño de sonido
Marc Sardà

Ayudante de dirección
Llorenç Ametller, José A. Gutiérrez.

Colaboración dirección de actores
Joan Castells, Al Víctor.

Reparto
Sebastián: Abraham Hurtado.
Diocleciano: Al Víctor, Ferran Terraza.
Narrador: Miguel Bosé.
Bailarines: Susana Castro, María Ángeles García, Mario García, Sergi Faustino, Ferran Carvajal, Teresa Navarrete, Joan Palau, Ricardo Salas, Marina Serrano.

Reparto
Alma de Sebastián y la virgen Erigona
Sopranos: Sophie Marin-Delgor, Ewa Malas-Godlewska, Nora Gubisch.

Los gemelos Marco y Marcelino
Contraltos: Cécile Eloir, Elsa Maurus.
Mezzosopranos: Lilliana Bizineche, Nora Gubisch, Sophie Pondjiclis, Elsa Maurus.
Roma: Orchestra Giuseppe Verdi di Milano y Coro de Valencia.
Cagliari: Orchestra e Coro del Teatro Lirico de Cagliari.
Perelada y Valencia: Orquesta de Valencia y Coro de Valencia.
Bilbao: Orquesta Sinfónica de Bilbao y Coro de la Coral de Bilbao.
Nápoles: Orchestra e Coro del Teatro di San Carlo.
Madrid: Orquesta de La Comunidad de Madrid y Coro del Teatro de la Zarzuela.

Producción: Espectáculos Otel.lo

Producción vídeo: OVIDEO, TV, S.A.

Producción ejecutiva: Esther Badía

Dirección técnica: Susana Jové

Regiduría: Isabel Bres, M.Angeles Huedo, Jordi Soler.

Realización vestuario: Catherine Verdier, Rosa Solé y compañía.

Realización escenografía
Roland Olbeter, Roig Curvado S.A., Alberto Pastor, Xesco Morros.

Técnicos escenario: Carlos Bertolín, Boris, Arturo Faura, Rodrigo Martín, Pulgui, Juan B.Torres, Alberto Pastor, Julio Cámara.

Sonido
Jordi Fatjó, Carlos Gómez, Jaime Rodríguez.

Estreno
5/5/97, en el Teatro dell’ Opera de Roma.

Representaciones
17

Una producción de l’Associazione Musica e Arte «Le Tre Caravelle» con la colaboración de I Concerti Telecom Italia, Instituzione del Concerti e del Teatro Lirico «Pierluigi de Palestrina» di Cagliari, El Palau de la Música de Valencia, el Festival Internacional Castell de Perelada y el Teatro Arriaga de Bilbao.

Debussy compuso esta ópera sobre un libreto de D’Annunzio que narraba la singular peripecia de San Sebastián. La Fura puso en escena este “misterio simbólico-musical” reelaborando, también simbólicamente, las imágenes que originalmente proponía el libreto.